Reseña: "La ridícula idea de no volver a verte" de Rosa Montero
A través de la extraordinaria trayectoria de Marie Curie, reflejada aquí en sus aspectos más desconocidos, Rosa Montero construye una narración a medio camino entre el recuerdo personal y la memoria de todos, el análisis de nuestra época y la evocación íntima; habla de la superación del dolor, de las relaciones entre hombres y mujeres, del esplendor del sexo, de la ciencia y de la ignorancia, de la fuerza salvadora de la literatura y de la sabiduría de quienes aprenden a vivir con plenitud y con ligereza.
Libérrimo y original, este libro inclasificable incluye fotos, remembranzas, amistades y anécdotas que transmiten el primitivo placer de escuchar buenas historias. Un texto auténtico, emocionante y cómplice que atrapará al lector.
Libérrimo y original, este libro inclasificable incluye fotos, remembranzas, amistades y anécdotas que transmiten el primitivo placer de escuchar buenas historias. Un texto auténtico, emocionante y cómplice que atrapará al lector.
Este pequeño libro llegó a mí por recomendación de una amiga lectora, de esas que siempre tienen algún buen título bajo la manga y que nunca se equivoca con sus recomendaciones. Recuerdo que estábamos en la Feria Internacional del libro de Buenos Aires, y salió la conversación de “el mejor libro del mundo que leíste” (ese tema que a lxs lectorxs nos hace sudar, digo, por lo de elegir un solo libro como el mejor), pero esta amiga muy convincentemente dijo que todxs deberíamos leer “La rídicula idea de no volver a verte” de Rosa Montero.
La autora toma como punto central a Marie Curie, científica polaca que descubrió el radio y el polonio, y la primera mujer en recibir un Premio Nobel de Física (junto a su marido en 1903), y unos años más tardes en solitario el de Química. Una mujer que se enfrentó con uñas y dientes a su época, como para no inspirarse en ella y su vida…
Compré media docena de biografías de Madame Curie, de la que antes ya sabia cosas, pero no tanto. Y, empezó a crecer algo informe en mi cabeza. Ganas de contar su historia a mi manera. Ganas de usar su vida como vara de medir para entender la mía; y no estoy hablando de teorías feministas, sino de intentar desentrañar cuál es el #LugarDeLaMujer en esta sociedad en la que los lugares tradicionales se han borrado (también anda perdido el hombre, desde luego, pero que ese pantano lo explore un varón). Ganas de merodear por las esquinas del mundo, de mi mudo, y de reflexionar sobre una serie de #Palabras que me despiertan ecos, #Palabras que últimamente andan dando vueltas por mi cabeza como perros perdidos. Ganas de escribir como quien respira. Con naturalidad, con #Ligereza.
Para Montero esta científica es su santa del libro, ella fue quien le generó un incendio de palabras y un vertiginoso torbellino luego de haber leído su diario íntimo y las cartas que escribió luego de la trágica e inesperada muerte de su marido. Así que a través de las letras de esta estoica y ruda polaca, la autora hace un análisis de estas cartas, de esas viscerales emociones que la llevaron a escribir lo que sentía, de sus recuerdos, logros y derrotas, y de esta manera, Rosa construye un puente entre la vida de Curie, su recuerdo personal y la sociedad.
¿Y de qué habla precisamente Rosa Montero? Un poco de todo: del lugar de la mujer (Marie Curie debió codearse a empujones entre los hombres para que la reconocieran como la gran científica que fue, aunque claro, digamos que Marie no quedó exenta de sus labores como mujer y madre de la época), de la feminidad, el patriarcado y la culpa de la mujer, esta maldita culpabilidad que nos hace rechinar los dientes; también se habla sobre las cosas que llegamos a hacer para honrar a nuestrxs padres y madres, del arte en todas sus formas y expresiones, y el tema que más me sorprendió y llegó: la muerte, el dolor y la superación, y creo que ahí está el punto de unión más fuerte entre Montero y Curie. Ambas padecieron la muerte de sus respectivos maridos, entonces, ¿cómo seguir adelante?, porque la idea de no volver a verlos es ridícula.
En resumen "La ridícula idea de no volver a verte" es un relato que te mantiene atrapada, y una lectura diferente a lo normal. El trabajo de investigación de Montero es excelente y muy preciso, además el libro cuenta con muchas fotos que acompañan la lectura, lo cual hace que sea más emocionante conocer más el lado íntimo de Marie Curie.
3 comentarios
¡Hola! Yo no leí ningún librito de esta autora pero no descarto hacerlo en algún momento. Un besote :)
ResponderEliminar¡Hola guapa!
ResponderEliminarEste libro lo tengo en la wishlist desde hace bastante. Espero hacerme pronto con él porque me llama mucho la atención y viendo tu reseña todavía me interesa más jiji
Un beso, nos leemos ^^
Hola! La verdad es que no conocía el libro, ni pensé que fuera a interesarme, pero tu reseña captó mi atención. Lo voy a tener en cuenta. Un besote ♥
ResponderEliminar♡ Tus comentarios me ponen muy contenta